viernes, 14 de diciembre de 2012

Diabetes



¿Debo controlar mi vista si soy diabético?

Es fundamental que las personas a las que se le han detectado niveles elevados de azúcar en sangre, incluso aunque no estén en fase de tratamiento de su hiperglicemia con fármacos antidiabéticos, realicen controles periódicos de fondo de ojo.
Retinopatía Diabética
Retinopatía fotocoagulada
La retina es la única parte del cuerpo humano en la que podemos visualizar directamente las venas y las arterias y valorar el estado de las mismas. Mediante una sencilla exploración, con o sin pupila dilatada según los casos, podemos ver si se presentan alteraciones en la retina. Podemos realizar retinografías (fotografías del fondo de ojo), angiografías   (fotografías del fondo de ojo previa inyección de contraste en vena) , exploraciones mediante OCT ( tomografía de coherencia óptica).
En el momento en que se detectan lesiones se plantean las opciones de tratamiento, entre las que se encuentra la fotocoagulación con laser de argón.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

¿Debería operarme de miopía?

Consideraciones a tener en cuenta.

A mediados de los noventa la cirugía refractiva cobró verdadero auge, a veces con más complicaciones que aciertos. En la última década este tipo de intervención se ha demostrado muy segura, siempre que se asocien la técnica y el criterio adecuados para cada caso.

Las motivaciones para operarse de un defecto refractivo, sea miopía, hipermetropía o astigmatismo, son varias. Incomodidad con las lentillas o con las gafas, requerimientos profesionales, deportivos o bien padecer defectos muy diferentes en los dos ojos de forma que la visión binocular se hace difícil.
Hemos de tener en cuenta que como cualquier otro procedimiento quirúrgico, la cirugía refractiva, en cualquiera de sus modalidades, conlleva un riesgo asociado, que aunque porcentualmente pequeño, hay que considerar.

La cirugía con excimer láser nos proporciona una precisión que hace que la mayoría de los resultados sean satisfactorios.
Por otro lado no todos los ojos se pueden operar y existen unos condicionantes como son el grosor corneal, la curvatura corneal, el número de dioptrías y la existencia o no de patologías asociadas, aspectos todos ellos que el oftalmólogo se encarga de explorar antes de aconsejar la cirugía.
Por todo ello lo mejor que puede hacer alguien interesado en operarse un defecto refractivo es acudir al oftalmólogo de su confianza para que le informe de las posibilidades.